Autor: Dr. Andrés Giussepe, Presidente de Poli‑data.com
Introducción
La Escuela de Economía Adaptativa (EEA) propone un marco analítico que integra la incertidumbre, la dinámica sistémica y la necesidad de políticas flexibles para gestionar economías en constante evolución. John Maynard Keynes (1883–1946), una de las figuras más influyentes en la teoría económica moderna, con su crítica a la racionalidad clásica y su énfasis en la demanda agregada, la intervención estatal y la inestabilidad inherente del capitalismo, ofrece fundamentos teóricos esenciales para esta escuela.
Su pensamiento ha sido clave para entender la dinámica de los sistemas económicos, especialmente en su carácter inestable y adaptativo. Este ensayo explora cómo las ideas de Keynes desafían los paradigmas neoclásicos, subrayando la importancia de la adaptación institucional y la gestión activa de crisis en un mundo caracterizado por desequilibrios dinámicos y cambios tecnológicos disruptivos.
1. Keynes vs. la racionalidad clásica y neoclásica
La economía clásica y neoclásica asume que los mercados se autorregulan mediante el equilibrio entre oferta y demanda, con agentes racionales que optimizan decisiones en mercados eficientes y autorregulados, donde maximizan utilidades bajo información perfecta (Smith, 1776; Marshall, 1890). Keynes introduce el concepto de «expectativas» y la «incertidumbre radical».
En La Teoría General del Empleo, el Interés y el Dinero (1936), refutó esta visión al demostrar que:
- La toma de decisiones económicas está influenciada por factores psicológicos y que los mercados financieros son propensos a la inestabilidad debido a la especulación.
- Propuso que la racionalidad de los agentes es limitada y depende del contexto histórico y social, contrastando con la visión mecanicista de la teoría neoclásica. En este sentido, su pensamiento se vincula con la idea de un sistema económico no determinista, en el que la incertidumbre y la adaptabilidad juegan un papel central.
- La racionalidad está limitada por la incertidumbre: La incertidumbre es un componente estructural de la economía y los agentes toman decisiones basadas en expectativas subjetivas, no en cálculos, precisos. Su concepto de «expectativas» y «espíritus animales» demuestra cómo la psicología y la incertidumbre influyen en las decisiones económicas, dando lugar a ciclos de auge y crisis.
Por ejemplo, durante la crisis de 2008, la aversión al riesgo de los inversores (una herramienta que ayuda a tomar decisiones informadas y a minimizar pérdidas) paralizó los mercados crediticios, contradiciendo la noción neoclásica de autorregulación (Akerlof & Shiller, 2009).
- El desempleo puede ser persistente: Los mercados no garantizan pleno empleo, como evidenció la Gran Depresión, donde la tasa de desempleo en EE.UU. alcanzó el 25% en 1933 (Bernanke, 2000).
- La demanda agregada impulsa el crecimiento: Keynes argumentó que la inversión privada es volátil y depende de factores psicológicos («espíritus animales»), requiriendo intervención estatal para estabilizar ciclos económicos (Keynes, 1936, p. 161).
2. La economía capitalista como un sistema dinámico, inestable y adaptativo: Ejemplos recientes
Keynes identificó la inestabilidad como una característica inherente del capitalismo, derivada de la fluctuación de la demanda y la especulación financiera. La economía es un sistema en permanente evolución. El capitalismo, lejos de ser un mecanismo estable, se caracteriza por fluctuaciones constantes. En este sentido, la Economía Adaptativa encuentra en Keynes un precursor de la idea de que las políticas económicas deben responder activamente a las transformaciones del entorno.
Ejemplos contemporáneos donde se demuestra que el capitalismo es inherentemente inestable incluyen:
- Crisis financiera global (2008): Producto de la desregulación de los mercados financieros y el colapso de los activos hipotecarios. La caída de Lehman Brothers y el colapso del mercado hipotecario subprime generaron una contracción del 4.3% en el PIB mundial (IMF, 2009). La intervención keynesiana, como el rescate bancario de EE.UU. (TARP, USD 700 mil millones), evitó una depresión (Blinder & Zandi, 2015).
- Pandemia de COVID-19 (2020): Generó un colapso de la demanda agregada, llevando a una intervención estatal masiva. El confinamiento global redujo el PIB mundial en un 3.1% (Banco Mundial, 2021). Políticas keynesianas como los cheques de estímulo en EE.UU. (USD 2.3 billones) sostuvieron la demanda agregada.
- Crisis de la deuda europea (2010-2015): Exacerbada por políticas de austeridad y la falta de flexibilidad en la estructura monetaria de la UE. Países como Grecia experimentaron caídas del PIB del 25%, requiriendo rescates (EUR 289 mil millones) que reflejaron la necesidad de coordinación fiscal keynesiana (Baldwin & Giavazzi, 2015).
- Inflación post-pandemia (2021-2023): La respuesta de los bancos centrales ha generado recesión en diversas economías. La combinación de estímulos fiscales y cuellos de botella en cadenas de suministro elevó la inflación global al 8.8% en 2022 (FMI, 2023), desafiando políticas monetarias tradicionales.
- Crisis energética global (2022): Provocada por disrupciones en la cadena global de valor y conflictos geopolíticos. Los precios del gas en Europa aumentaron un 300%, obligando a subsidios estatales (EUR 600 mil millones en la UE) para proteger ingresos familiares (IEA, 2023).
3. La Racionalidad económica de Keynes: Demanda Agregada y Política Fiscal
Keynes replanteó la racionalidad económica al priorizar el comportamiento macro sobre las decisiones microeconómicas individuales. Sus conceptos clave son:
3.1. Demanda Agregada como motor del crecimiento
Keynes demostró que las economías pueden operar por debajo de su capacidad productiva si la demanda es insuficiente. Ejemplos empíricos:
- New Deal (1933-1939): La inversión pública en infraestructura (USD 40 mil millones actualizados) redujo el desempleo en EE.UU. del 25% al 14% (Fishback, 2010).
- Plan de Recuperación Europeo (2020): El fondo NextGenerationEU (EUR 750 mil millones) financió transiciones verdes y digitales, elevando el PIB de la UE un 1.5% en 2022 (Comisión Europea, 2023).
3.2. Multiplicador keynesiano
El gasto público genera un efecto multiplicador en la economía. Durante la pandemia, los estímulos fiscales en EE.UU. tuvieron un multiplicador de 1.5, creando 3 millones de empleos (Congressional Budget Office, 2021).
3.3. Políticas Contracíclicas
Keynes abogó por ajustar impuestos y gasto público para suavizar ciclos económicos. Corea del Sur aumentó su gasto social en un 20% durante la pandemia, evitando una recesión profunda (OECD, 2021).
Aplicaciones de la Teoría Keynesiana en Empresas e Industrias
Si bien Keynes no se centró en la innovación tecnológica como Schumpeter, su enfoque en la inversión pública y el gasto fiscal para estimular la demanda agregada es crucial para entender los cambios estructurales en la economía. Empresas como Tesla, que han dependido de subsidios estatales para su desarrollo inicial, ejemplifican la aplicación keynesiana a la innovación y el crecimiento económico.
Empresas como General Motors y Apple han sobrevivido y prosperado gracias a políticas keynesianas de inversión en tiempos de crisis. Por ejemplo, el rescate financiero de la industria automotriz estadounidense en 2008 evitó una catástrofe económica mayor. De igual forma, las inversiones contracíclicas en tecnología han permitido la expansión de compañías como Amazon y Tesla.
4. Contribuciones de Keynes a la Escuela de Economía Adaptativa
La EEA integra las ideas keynesianas en los siguientes pilares:
- Flexibilidad en políticas económicas: Abogó por un enfoque pragmático, adaptativo y basado en la evidencia.
- El Estado como regulador del ciclo económico: Keynes demostró que la política fiscal y monetaria pueden estabilizar la economía. La intervención estatal es proactiva, dado que los gobiernos deben actuar como estabilizadores sistémicos, ajustando políticas a contextos dinámicos (Stiglitz, 2018).
- El rol de la demanda agregada: La inversión pública puede compensar la insuficiencia de la demanda privada. La gestión de la demanda agregada es clave, para tal fin, se debe priorizar empleo y consumo sobre la austeridad fiscal, como en el modelo nórdico (Grusky et al., 2019).
- Enfoque en incertidumbre y expectativas: Replantea la teoría económica incorporando la psicología y la volatilidad del comportamiento humano. Los modelos económicos deben incorporar factores psicológicos y riesgos no cuantificables (Shiller, 2019).
- Política fiscal como herramienta estabilizadora: Gobiernos deben intervenir activamente en momentos de crisis para sostener la demanda.
- Teoría del empleo: Rechazo al ajuste automático del mercado laboral y defensa de políticas activas de empleo. Colocó la reducción del desempleo como un objetivo central de la política económica.
- Sistema financiero y especulación: Destaca el rol desestabilizador de los mercados financieros y la necesidad de regulación.
- Crecimiento y desigualdad: Plantea la redistribución de ingresos como mecanismo para sostener el crecimiento económico y garantizar la estabilidad social. Sistemas tributarios progresivos y salarios mínimos elevados, como en Alemania (remuneraciones laborales = 55% del PIB vs. 48% global) (ILO, 2022).
5. Recomendaciones para Actores Económicos
Gobiernos y Planificadores Económicos
- Políticas fiscales contracíclicas para estabilizar el crecimiento económico y mitigar crisis: Crear fondos de reserva (ej: Noruega con su Fondo Soberano de USD 1,4 billones) para estabilizar demanda en crisis.
- Invertir en sectores estratégicos, para fomentar la innovación y el empleo.
- Inversión en infraestructura resiliente: Proyectos verdes y digitales, como el Green New Deal de EE.UU. (USD 369 mil millones en 2022).
- Protección social adaptativa: Salarios mínimos indexados a la inflación (ej: Francia, EUR 1.747 mensuales en 2023).
- Regular el sistema financiero para evitar crisis especulativas.
Empresarios
- Inversión en I+D colaborativa: Invertir en innovación y adaptar estrategias según la dinámica del mercado. Alianzas público-privadas, como la Iniciativa CHIPS de EE.UU. (USD 52 mil millones para semiconductores).
- Priorizar la inversión en innovación y productividad en períodos de recesión.
- Modelos de negocio antifrágiles: Diversificar cadenas de suministro, como Toyota post-Fukushima (redujo pérdidas en 2021 un 30%).
- Diseñar modelos de negocio resilientes ante cambios disruptivos.
- Implementar esquemas de responsabilidad social empresarial para reducir desigualdades.
Trabajadores
- Participar en capacitación continua, para adaptarse a cambios tecnológicos.
- Impulsar políticas de distribución equitativa del ingreso.
- Promover modelos de participación en la toma de decisiones económicas.
- Demandar estabilidad laboral mediante políticas públicas activas.
- Formación en habilidades emergentes: Certificaciones en energías renovables (crecimiento del 40% en empleos verdes, 2020-2023).
- Participación en ganancias: Modelos como el de Siemens (10% de utilidades a empleados), aumentando productividad un 15%.
Redistribución del Ingreso
- Impuestos a rentas altas y patrimonios: Francia recauda el 45% del PIB vs. 34% en EE.UU., reduciendo desigualdad (Gini de 0,29 vs. 0,41).
- Salarios dignos y negociación colectiva: En países PADI como Suecia, el 70% de trabajadores están sindicalizados, con brechas salariales mínimas.
Conclusión
El pensamiento de Keynes es una base fundamental para la Economía Adaptativa, ya que introduce una visión más realista y dinámica de los sistemas económicos. Él incorpora la incertidumbre, la inestabilidad y el papel del Estado como actor económico fundamental. Sus ideas continúan vigentes en un mundo en constantes cambios disruptivos, lleno de incertidumbre y volatilidad, donde la adaptabilidad es clave para la sostenibilidad económica.
Keynes revolucionó la economía al demostrar que los mercados no se autocorrigen y requieren intervención estatal para lograr estabilidad dinámica. Su énfasis en la demanda agregada, la incertidumbre y las políticas contracíclicas ofrece un marco vital para la EEA, que prioriza la adaptación institucional y la equidad en un mundo de cambios disruptivos. Implementar sus principios en el diseño de políticas económicas puede ayudar a construir sociedades más equitativas y resilientes frente a los desafíos del capitalismo globalizado.
Las recomendaciones aquí planteadas buscan equilibrar crecimiento con justicia social, inspirándose en modelos como los países PADI para construir economías resilientes e inclusivas.
Referencias
- Adam Smith, An Inquiry into the Nature and Causes of the Wealth of Nations. (1776). Generalmente se encuentra en múltiples ediciones, pero la original es de 1776.
- Akerlof, G. A., & Shiller, R. J. (2009). Animal Spirits: How Human Psychology Drives the Economy. Princeton University Press.
- Alfred Marshall, Principles of Economics. (1890). Al igual que Smith, hay muchas ediciones, pero la primera es de 1890.
- Baldwin, R., & Giavazzi, F. (Eds.). (2015). The Eurozone crisis: A consensus view of the causes and a few possible solutions. CEPR Press.
- Bernanke, B. S. (2000). Essays on the Great Depression. Princeton University Press.
- Blinder, A. S., & Zandi, M. (2015). How the American Recovery Act Ended the Great Recession. Moody’s Analytics.
- Congressional Budget Office. (2021). The Budget and Economic Outlook: 2021 to 2031. CBO.
- European Commission. (2023). Next Generation EU: Key Facts and Figures. https://ec.europa.eu
- Fishback, P. T. (2010). Well worth saving: How the New Deal built America. Oxford University Press.
- Grusky, D. B., Wimer, C., Smeeding, T., & McMurry, D. (Eds.). (2019). The Inequality Crisis: America’s Growing Economic Divide. Stanford University Press.
- IEA (International Energy Agency) (2023). World Energy Outlook 2023.
- (2022). Global Wage Report 2022-2023: The Impact of Inflation and COVID-19 on Wages. International Labour Organization.
- (2023). World Economic Outlook: Navigating Global Divergences. International Monetary Fund.
- Keynes, J. M. (1936). The General Theory of Employment, Interest and Money. Palgrave Macmillan.
- Krugman, P. (2009). The Return of Depression Economics and the Crisis of 2008. W. W. Norton & Company.
- (2021). Economic Outlook No. 110. OECD Publishing. https://doi.org/10.1787/16097408
- Piketty, T. (2014). Capital in the Twenty-First Century. Harvard University Press.
- Minsky, H. (1986). Stabilizing an Unstable Economy. Yale University Press.
- Stiglitz, J. E. (2018). Globalization and Its Discontents Revisited. W. W. Norton & Company.
- Stiglitz, J. (2016). The Euro: How a Common Currency Threatens the Future of Europe. W. W. Norton & Company.